Esta estela de partículas son originadas por el paso del cometa Swift-Tuttle que se acercó a las inmediaciones del Sol en 1.992. Cuando estas partículas chocan contra la atmósfera terrestre, se origina un rozamiento que provoca una estela luminosa hasta que la partícula se consume; Se acaba de formar una estrella fugaz.
Como las partículas dejadas por el paso del cometa están relativamente cerca unas de otras a lo largo de la senda dejada por el cometa, resulta que aparentemente desde la Tierra parece como si las estrellas fugaces que forman la lluvia se originaran en un mismo punto del cielo, que se llama radiante.
El nombre de Perseidas procede de la constelación donde se ubica el radiante, en este caso, en la constelación de Perseo.
Este año se considera bueno para la observación de la lluvia, ya que la Luna está en Cuarto Creciente, ocultándose por el horizonte al empezar la noche. Y es que la Luna suele ser una mala aliada para observar las lluvias de estrellas, ya que aporta luminosidad a la noche y no facilita observar los objetos débiles.
Para observar con comodidad la lluvia de estrellas de las Perseidas (o Lágrimas de san Lorenzo, como también se las conoce), hay que hacerlo a simple vista sin instrumentos ópticos y tumbarse boca arriba orientando la vista hacia las proximidades de la constelación de Perseo, concretamente entre las constelaciones de Osa Mayor, Cisne y Pegaso hacia las 22:45h (hora civil) del 12 de Agosto, día en que se aprecia el máximo de estrellas fugaces, esperándose una frecuencia de unos 100 meteoros/hora, aunque ya se puede ver alguna Perseida entre mediados de julio y últimos días de agosto.
Acompaño una carta de locacalización de Perseo a partir de Casiopea. Se sitúa entre esta constelación y el horizonte NE.
Desde la Asociación Astronómica del Bierzo tenemos organizada una observación pública para divisar el fenómeno el día 14 de agosto desde el Castillo del Cornatel, en el municipio de Priaranza del Bierzo.
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